Cara femenina con rasgos serenos, peinada con un alto "onkos" (peluca propia de los actores de teatro en la Antigüedad romana. Todos los papeles eran representados por hombres que llevaban una máscara). Una "taenia" (tira, diadema) le sujeta el cabello.
Piedra calcárea de finos granos.
Obra galo-romana, época imperial, siglo II dC (?).
Origen: Vaison-la-Romaine, barrio de San Lorenzo. 1838, compra, 1839.
Información del propio museo. Mi traducción.
En página web de la Fundación Calvet viene menos información que la que tienen en la explicación del propio museo. En el Museo Lapidario no tiene página.
Os dejo con varias entradas sobre el teatro romano imperial (1, 2) de los que voy a subrayar los siguientes párrafos (presentación):
"El teatro en la época romana iba más allá de lo que podemos esperar de un género literario, para entroncar desde sus más remotos orígenes con la religión, en especial la del dios Dionisio [Figura 1]; los elementos iconográficos constituyen un testimonio perenne. Y dentro de la religión, los teatros romanos jugaron un papel esencial para la propaganda dinástica y el culto imperial.
Gracias a la arqueología, conocemos cada día mejor los espacios para las representaciones, tanto en lo que concierne a las instalaciones provisionales como a los teatros estables, y también a las remodelaciones diversas que experimentaron ciertos teatros para adecuarlos a otro tipo de espectáculos, lo cual es especialmente frecuente en la mitad oriental del Imperio, donde los juegos de anfiteatro, a falta de edificios construidos a este propósito, tenían lugar en los teatros [Figura 2]. Un apartado que no deja de despertar interés y curiosidad es el dedicado a los montajes y a los decorados, la maquinaria y los trucos escénicos. Un hecho bien documentado es el del uso del telón que, a diferencia de los nuestros, no bajaba, sino que ascendía verticalmente desde una fosa situada delante de la escena [Figura 3].
Capítulo ampliamente representado es el de los actores que llevaban el rostro cubierto con máscaras cuyos tipos sabían reconocer de inmediato los espectadores; a excepción del mimo, en el que intervenían también las mujeres, los actores eran siempre hombres que interpretaban asimismo los papeles femeninos, revestidos de la correspondiente máscara [Figura 4]. Es muy abundante la documentación arqueológica al respecto, lo cual ha permitido reunir aquí un elenco muy representativo en diferentes soportes".
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